LA REVOLUCIÓN DE TRUJILLO DE 1932
Por: Mállory Henríquez Villanueva

No cabe dudas, que cuando las pasiones se enfrían, es cuando la Historia empieza a marcar los hitos respectivos; el análisis del materialismo histórico se profundiza, sacando como resultado las verdades que muchas veces por creados apasionamientos o intereses, mezquinos, se ocultaron.
He terminado de leer el libro de reciente aparición en el mercado, titulado “LA REVOLUCIÓN DE TRUJILLO (Asalto al Cuartel O’Donovan en 1932 Primera Insurgencia Civil del Siglo XX)” cuyo autor es el conocido escritor Blasco Bazán Vera, a quien debo de felicitar por la culminación de este trabajo de investigación, muy bien documentado. En realidad, el autor se ha esmerado en entregarnos, a los amantes de la lectura, una historia Comparativa, Testimonial y Crítica.
Comparativa, porque nos entrega fuentes de otros autores que asomaron escribir sobre esta cruenta revolución, tales como Joaquín Díaz Ahumada (“Luchas Sindicales en el Valle Chicama”) como un corolario a los móviles que se fueron dando para que se desencadene la revolución que hoy trata magistralmente Blasco Bazán. El Coronel Félix León Echagüe, Alejandro Nureña de la Flor (“Lo que Vi y lo que sé de la Revolución de Trujillo”), Guillermo Thornike (“El Año de la Barbarie”), Jorge Basadre (“Historia del Perú”), Leoncio Rodríguez Manfur (“Mi Actuación en el Movimiento Revolucionario de Trujillo”), Luís Alberto Sánchez (“Una Larga Guerra Civil”); comentarios y comunicados de los diarios capitalinos: El Comercio y La República. De los locales: El Norte, La Nación y La Industria.
Para motivarnos un poco, leamos un episodio narrado por el militar, que nunca lo fue, Félix León Echagüe, que para escribir sobre este suceso usó este seudónimo, siendo su verdadero nombre como dice Blasco Bazán, de Federico Echeandía: “…conforme avanzaba el día, el fuego se hacía más nutrido. Las ametralladoras se entregaron a una charla terrorífica con resultados fatales para ambos bandos. La muerte se hacía presente a cada momento. Tras de cada disparo, lo fatal hacía una conquista inevitable.
En la tarde, casi al entrar la noche, la ciudad estaba virtualmente en manos del gobierno. Por distintos lugares de la población, las fuerzas leales habían entrado, dejando muchas muertes tras sus pasos; pero aún en esta condición, durante toda la noche no cesaron los disparos. Los revolucionarios, vencidos casi, en la agonía de su jornada civil, abrían fuego constante contra los contrarios. Cumplían así su misión heroica. La trayectoria marcada a lo largo de los acontecimientos, era de consecuencias para la ciudad de Trujillo. Ya habían usado de métodos de venganza los soldados que entraban a la ciudad. Habían hecho campo matando. Mejor dicho, se tomaba la población a sangre y fuego, cobrando diente por diente, ojo por ojo, por el delito de sublevarse contra un gobierno que atentó abiertamente contra el derecho a la vida que tiene todo ciudadano.
¿Pero, quién durmió esa noche en Trujillo?. ¿Acaso con el resultado de la situación alguien tendría sueño en la ciudad?. Sólo dormían los muertos. Aún los heridos agonizaban pidiendo noticias de la revolución. Este espíritu rebelde, se había hecho carne en el pueblo, moría con él y sólo así se deduce que se haya derrochado tanto heroísmo y tanto valor revolucionario.
Testimonial, porque este trascendental libro incluye testimonios muy importantes y esclarecedores que nuestro escritor a recogido de algunos sobrevivientes de esta crueldad, como: Alfredo Tello Salavarría, Raúl López Obando, Víctor Nureña, Artidoro Esquivel Diestra, hermano de Remigio Esquivel. Raúl López Obando quien nos hace saber sobre el delincuente alias “Chueco Carrillo” o Sandoval que dirigiera y ejecutara la masacre en la cárcel de Trujillo; Asunción Vásquez, Manuel Céspedes, Víctor M. Nureña, Cartas del Teniente Coronel del E.P. Gustavo “El Zorro” Jiménez, partes policiales reales, comunicados de El Coronel Comandante General del Ejército Ruiz Bravo y el libro de sesiones de la Municipalidad de Trujillo dirigido por el Alcalde Manuel Ángel Ganoza Chopitea y sus concejales que alababan al gobierno de Sánchez Cerro aprobando los fusilamientos y abusos que cometían aquel entonces las fuerzas del orden, que ya habían bombardeado la ciudad, sin tener en cuenta que lo habitaban niños, damas, ancianos y gente que nada tenía que hacer con la revolución. Blasco Bazán Vera narra fidedignamente la forma como, por causa de este suceso revolucionario, Trujillo fue castigado sin misericordia por aire, mar y tierra, culminando más tarde con la presencia de la Corte Marcial que fusiló a cientos de rebeldes en las ruinas de Chan Chan.
Crítica, porque el autor con magistral sutileza y sobre todo, imparcialidad, va entrelazando dichos acontecimientos. De ahí que, allí mismo, Blasco Bazán termina diciendo:
“Culminada la obra propuesta, pienso, que he abierto una ventana donde ingresen muchas cosas nuevas qué decir o, al contrario, salir por ella muchas verdades ocultas que, cuál bálsamo, cicatricen heridas por mucho tiempo abiertas por la insensatez y el agravio. Toda la belleza heroica de un pueblo quedó diluida por una execrable acción que jamás cometió y que más bien sirvió para ofuscar los espíritus. Las batallas libradas entre ambos contendores quedan como un ejemplo de arrojo e intrepidez”.
Para terminar, con este breve comentario, recomiendo este libro “LA REVOLUCIÓN DE TRUJILLO” que debe ser tomado en cuenta en la nueva currícula de estudios que se formule en la Nueva Reforma Educativa Regional, por el rescate neutral y equitativo que nuestro escritor nos brinda, asimismo, extiendo esta recomendación a todas aquellas personas ávidas por conocer sobre la Revolución de Trujillo, no dejen de leer este libro de 320 páginas, impreso en papel bond 80 grs. Carátula a todo color y plastificada. Que después de 77 años de los sucesos, sus páginas los harán vivir momentos de angustia, impotencia y desesperación frente a la trama que irán recorriendo sus ojos. Es decir un libro históricamente valiosísimo, digno de tenerlo en la biblioteca particular o de regalarlo a nuestras mejores amistades en señal de nuestra mejor disposición a la difusión cultural.

2 comentarios:

Carlos Arroyo Reyes dijo...

Estimado amigo:
Saludos y felicitaciones por la gran labor cultural que realiza. Vivo en Suecia y me gustaría poder leer su libro sobre la revolución de Trujillo. Le rogaría que me indicara cómo puedo hacer para adquirirlo.
Atentamente,
Carlos Arroyo Reyes

Percy Zapata dijo...

ESTIMADO AMIGO, ESTOY INTERESADO EN AMPLIAR MIS CONOCIMIENTOS SOBRE LA REVOLUCION EN TRUJILLO EN EL AÑO 1932, SUCESO QUE LOS LIBROS DE HISTORIA O NO LO MENCIONAN, O SI LO HACE, LO HACEN SOMERAMENTE EN NO MÁS DE 2 LINEAS.
DESARIA ADQUIRIR SU TEXTO, SI PODRIA DECIRME LA MANERA, LE ESTARE AGRADECIDO, MI CORREO ES: DOCPERCY_30@HOTMAIL.COM.
MUCHAS GRACIAS.