Letras Liberteñas

GLADYS EVA BENKO ANGULO

Escribe: Blasco Bazán Vera

Nació el 3 de octubre de 1949 en Contumazá, Cajamarca hija del yugoslavo Mirko Benko y madre peruana, Olga Angulo Vigo. Cursó sus estudios primarios en Contumazá, y la secundaria en el centenario “Santa Rosa” de Trujillo. Viajó a España en 1969. Becaria del Instituto de Cultura Hispánica. Cursó estudios de Ciencias Políticas y Sociología en la Universidad Complutense de Madrid. En 1967 sacó a luz su poemario “Cada página un recuerdo y un sentir”, que encierra un mensaje, un recuerdo, una gratitud. Probemos el poema “Calla el mundo” Pág. 16 cuando dice:

CALLA EL MUNDO

Calla el mundo aleve, resonante y fiero

para oir el trino del triste jilguero,

para oir del árbol la canción de cuna,

para ver en lo alto la brillante luna.

Calla cuando el agua se desata en furia,

calla cuando el pobre llora su penuria,

más al callar deja el rastro de su queja

como fiel testigo del mal que lo aqueja.

Para conocer mejor a nuestra poeta, leamos el poema “Río” (Pág. 9) donde vislumbramos los toques sonoros y armoniosos de una marcada sensibilidad producto de un alma decidida a recibir las palpitaciones del amor y devolverlos con la misma o quizá más señalada intensidad. Cada uno de los poemas de este libro marcan el compás de lo que, como persona, sería más tarde nuestra autora. En ellos notamos la sencillez, la blancura de expresión, la inocencia; la melancolía que no aprisiona ni atosiga, al contrario, es la válvula de escape por la que alguien lanza al mundo dardos que no llevan durezas ni venenos sino mensajes de bien, sentimientos de comprensión, gritos que azuzan a ser mejores. Leamos el poema:

Río que corres por lisas piedras,

por sobre las rocas y las firmes hiedas,

llevas en tu cauce riachuelo claro

un correr dormido y un sonido raro.

Este es el primer cuarteto de los tres que forman el poema. Notamos no a una principiante poeta sino ¡abrase el telón!, a la mujer que escribe con el don de la profecía.

Río que en tus aguas frías azuladas

se deslizan peces de aletas plateadas,

no le hagas daño, no los lleves lejos

déjalos que jueguen y que mueran viejos.

Nuestra poetisa en abnegada servidora, suplica al todo poderoso río con frases encarnadas y sentenciosas: ¡Tus aguas frías y azuladas! como insinuándole decir si eres así, mis alegrías son enardecidas que lograrán vencer tu rebeldía si es que algún daño intentes hacer a los seres que en ti viven. Así sin soberbia alguna nuestra poeta demanda no perturbar a aquellos peces que no vienen a ser sino la humanidad y pide que si llegase el postrer momento éste los encuentre incólumes, riéndole a la vida.

Hay en el remanso de tus aguas claras

reflejos de luces y también de caras,

Caras que derraman lágrimas saladas

y luces que envuelven vírgenes calladas.

El lirismo se desparrama en este último cuarteto. Fluye la vena creadora y con ella compromete lo que será en el futuro la vida de nuestra poeta. Aquí, Gladis Benko se confiesa y sin querer se autoseñala lo que será después como mujer. Su amor por las cosas que le rodean le permiten escribir realidades, augurando que todo mal sucumba ante el petitorio de un alma angelical al decirle al Río, mejor dicho, al decirle al hombre, que esos peces, digamos, los desposeídos, los indefensos, no derraman lágrimas en metáforas, sino que son metáforas derramando lágrimas saladas de agradecimiento por seguir viviendo al amparo de una virgen callada y suplicante que los custodia.

Gladis Benko Angulo y su libro “Cada página un recuerdo y un sentir” son rescatados, ahora, para beneficio del público lector, del profesor acucioso y pata el alumno a fin de que sensibilice más su alma. Ninguno de los poemas de este libro lleva la menor pizca de desesperanza. Al contrario, todos llevan un mensaje, un sentir, un grato recuerdo y gratitud que es uno de las nobles valores del hombre tan venido a menos. Gladis, cual jardinera, ha cogido los mejores sentimientos de su ampuloso jardín y cual fruto señeros nos lo entrega para saber cultivar la paciencia, el amor y la paz.

Gladis Benko ha ejercitado el periodismo y fue co-fundadora y redactora de “La Mujer y la Lucha” del Movimiento Democrático de Mujeres de Madrid – España y de Noticias Hispania Press. Su último poemario lleva por nombre “Arenas”.

Dra. MARA GARCIA
Obtuvo su Ph.D, en la universidad de Kentucky. Catedrática de la Universidad de Brigham Young. Ha publicado artículos crñiticos, capítulos de libros, reseñas, entrevistas etc. sobre escritores hispoanamericanos. En la foto, agradeciendo la presencia del numeroso público que se dio cita durante el lanzamiento de su libro: "CESAR VALLEJO: ESTUDIOS Y PANORAMAS CRITICOS"


ME ENCUENTRO PRESENTANDO EL LIBRO "CÉSAR VALLEJO: ESTUDIOS Y PAMORAMAS CRÍTICOS" DE LA DOCTORA MARA GARCÍA EL DÍA MARTES 19 DE JULIO DEL 2011 EN LA CASA DE LA EMANCIPACIÓN DE TRUJILLO. PERÚ

En la mesa: Desde el fondo: Amparo Vallejo, sobrina carnal del César Vallejo, Dra. Mara García, catedrática de la universidad de Brigham Young de los EE.UU. Adolfo Alva Lescano, Presidente del Instituto de Estudios Vallejianos, Stephen Hart, (Inglaterra) estudioso de Vallejo, Goretty Ramírez (Francia)

MARA GARCIA Y CÉSAR VALLEJO

Escribe: Blasco Bazán Vera

El momento que esta noche nos congrega tiene un grande y revelador objetivo: Seguir hurgando las huellas de César Vallejo Mendoza el más insigne poeta de América Latina y orgullo de nuestra región La Libertad.

Nunca un hombre, como César Vallejo, concitó, concita y seguirá concitando tanta atención del mundo entero. El trajín de su vida, la estela y agudeza de sus creaciones, siguen siendo un emporio de virtudes al que ineludiblemente tenemos que recurrir para beber sus aguas que brindan nuevos acontecimientos y por ende nuevos parabienes.

La vida de Vallejo nació signada para transformar al hombre.

Vallejo aceptó el reto del destino y éste, no pudo encontrar mejor aliado para dar a conocer la valía de la humanidad. Así, César Vallejo Mendoza, se cristianizó como el portaestandarte de la belleza de la vida convirtiendo el desliz de otros en triunfo de la humanidad… Vallejo sigue siendo el inmenso océano de aguas destinadas a aplacar la sed de almas que buscan la probidad del hombre.

Vallejo sigue siendo el gran generador de acontecimientos. El hombre se acerca a él y en él encuentra nuevo episodio que narrar. Su vida y su genialidad son tan admirables, que todo aquel que lo estudia y describe, lo toma como combustible para cincelar las muchas veces marchitadas esperanzas que adolece el hombre. El trajinar de Vallejo aún no termina pues, los que creyeron que lo que se dijo de él quedó en el olvido, se equivocan. Sus escritos, cual ave Fénix, recobran vida, como lo estamos palpando esta noche al tener en manos este libro tan realista y conmovedor titulado “César Vallejo: Estudios y Panoramas Críticos” de la distinguida Docente de la Universidad de Utah, la trujillana Dra. Mara García.

Nuestra investigadora y literata que tiene en su haber múltiples libros publicados, que ha recuperado la valía literaria de la mujer, que se ha introducido en revivir y actualizar al genuino “Paco Yunque”, que el cargo de ser Presidente del Instituto de Estudios Vallejianos en los EE. UU, lo desempeña con admirable responsabilidad; ella, acorde con su saber y deber hacia Vallejo, ha ido recogiendo lo que otros y ella misma escriben sobre nuestro vate universal y hoy nos lo entrega en este importantísimo libro cumpliéndose el mandato de que Vallejo sigue siendo la fuente dadora de satisfactorios sucesos.

Con este libro vamos a alimentar más nuestra inteligencia pues profundizaremos nuestro conocimiento con las diversas facetas literarias que esgrimió Vallejo en su calidad de Poeta a través de lo escrito por los estudiosos Stphen Hart, Merlin Foster, Iván Rodríguez Chávez, Goretti Ramírez, César Adolfo Alva Lescano, donde es meritorio resaltar la presencia de Stphen Hart, Presidente Fundador del IDEV en Inglaterra y uno de los principales especialistas en el mundo sobre la obra poética de Vallejo.

También progresaremos mucho más al conocer al Vallejo Narrador, a través de Juan Carlos Galdo y de la propia autora del libro, Dra. Mara García, quien nos habla sobre la narrativa fantástica de Vallejo y nos brindan un inteligente recuerdo de Paco Yunque.

Para resaltar la calidad informativa que usó Vallejo, este libro también enfoca al Vallejo periodista a través de la altruista pluma de Luis Alberto Sánchez y también del claro talento de Segundo Llanos Horna, autor de muchos libros que reincide en abordar el tema in extenso desde una óptica taxonómica con énfasis en los géneros y especies periodísticas cultivadas por nuestro santiaguino poeta, cuya faceta de periodista no había sido aún explorada en este aspecto de la ciencia comunicacional.

Como estamos escuchando, la escritora, Dra, Mara García, nos está entregando un libro sustancioso que permite ensanchar mucho más nuestro conocimiento sobre la valía de un Vallejo Poeta, de un Vallejo Narrador, de un Vallejo Periodista; y no sólo eso, también este libro azota nuestro espíritu haciéndonos conocer a un Vallejo Dramaturgo y a un Vallejo Traductor. Como Dramaturgo, a través de George Woodyard, catedrático emérito de la universidad de Kansas aunándose en esta misma tarea lo escrito por el docente peruano René Estrada Cruz con su hermoso alegato de Vallejo y la piedra cansada. Y, como Traductor, faceta muy poco conocida de Vallejo, lo describe la fina pluma de la magíster en Literatura de la UNMSM, Rosario Valdivia Paz Soldán.

Pero, la Dra. Mara García, acorde a la clara inteligencia que le caracteriza, vuelve a insertar en este su importante libro, el hilo de la madeja que hace imperecedera la vida de César Vallejo y esa importante parte es el capítulo denominado de Míscelánea donde están las indagaciones e investigaciones hechas por Eduardo Quiroz Sánchez, Antonio Cornejo Polar, Mara García y de este su sencillo servidor, con quienes la distinguida estudiosa, ha tenido la gentileza, a través de lo que hemos escrito, echar más leña al fuego a fin de que la llama entusiasmada de nuestro poeta jamás se extinga.

Es hermoso comentar sobre Vallejo y mucho más conocer a través de este libro nuevos horizontes del vasto testimonio que como hombre y poeta ostenta nuestro insigne personaje y que de no ser por la acuciosidad de la Dra. Mara García, estos valiosos escritos habrían pasado al rincón de los recuerdos. En esto radica el valor de este libro que lapida con creces el soslayo, la indeferencia y el terrible olvido en que caen valiosos hombres por obra y gracia de la falta de investigación. Gracias a este libro, se rescata en demasía pasajes valiosos que engalanan la fama de nuestro vate universal.

Leyendo este libro semejamos noveles malabaristas saltando sin temor las vallas de la vida, gozando al compás de la lectura que nos brinda el Vallejo poeta, el Vallejo narrador, el Vallejo periodista, el Vallejo dramaturgo, el Vallejo traductor, el Vallejo deslumbrante y el Vallejo biografiado e interrogado a través de la jugosa entrevista que da Mara García al prestigioso periodista Alejandro Guerrero.

Señoras y señores, este libro titulado “César Vallejo: Estudios y Panoramas Críticos” de la distinguida Docente de la Universidad de Utah, la trujillana Dra. Mara García, logra que ensanchemos mucho más el conocimiento sobre la egregia existencia de nuestro poeta del pueblo César Abraham Vallejo Mendoza y que las letras liberteñas cobren más ascendencia en el parnaso literario del ámbito nacional.

BLASCO BAZÁN VERA

GUELLY VILLANUEVA Y SU LIBRO

En esta foto me encuentro en el Salón de Actos del Colegio de Ingenieros de Chiclayo para presentarle a mi amigo Guelly Villanueva Díaz su importante libro titulado "PERFILES APRISTAS". En ese momento Guelly era Gobernador de Chiclayo y pocos días después fue nombrado como Embajador en la Rep. de Guatemala. A mi derecha, con lentes se encuentra el congresista Luis Falla La Madrid.


MARA GARCIA Y BLASCO BAZÁN

En la foto estamos la distinguida escritora Mara García, docente de la Universidad de Utah - EE.UU en mi bliblioteca particular momentos antes de presentar al público su libro "César Vallejo: Estudios y panoramas críticos", en La Casa de La Emancipación de Trujillo el martes 19 de julio de 2011.

Rescatando nuestro pasado

TRES LIBERTEÑOS EN EL COMBATE DE ANGAMOS

Escribe: Blasco Bazán Vera, blascobv@hotmail.com

Escribir sobre Miguel Grau y su Huáscar, es notable. Más notable es agregarle el nombre de tres liberteños que acompañaron y lucharon con nuestro héroe en los terribles episodios que sostuvimos con Chile en 1879.

Los liberteños: Román Tejada Villarreal, Nicolás Bonilla y Tomás Esteves, ya no son olvidados pues sus nombres están escritos en la mansión de los héroes desde el 11 de julio de 1927, fecha en que el Centro Naval del Perú, los incorporó en calidad de Socios Honorarios, pues se aceptó que Villarreal, Bonilla y Esteves fueron miembros de la plana menor del Huáscar, según nos dice Zanutelli Rosas en su libro “El Almirante Grau y la Plana Mayor del Huáscar”

Román Tejada Villarreal, Era un muchacho que tenía 16 años. Hijo de José Camilo Tejada y de Fernanda Villarreal, nacido en Trujillo. Su puesto a bordo fue el de bocafragua. Después de la guerra se quedó a vivir en Lima y el 26 de mayo de 1901 contrajo matrimonio, en la parroquia de San Marcelo, con Zenobia Álvarez. Tuvo varios hijos. Al paso de los años Román Tejada se trasladó al Callao y allí murió el 12 de julio de 1919 en su domicilio de la calle Lima y Guise Nº 66.

Nicolás Bonilla, en marzo de 1901 moraba en Salaverry. Era soltero. El Prefecto de La Libertad, José Antonio Delfín, certifica que Bonilla” vive” y “reside” en Salaverry, donde se halla destinado actualmente. En su expediente se conserva el diploma, firmado por el General Cáceres y el general Justiniano Borgoña el 9 de octubre de 1886 que dice: “El Congreso Nacional ha concedido el uso de una medalla de honor a los sobrevivientes del monitor Huáscar, que combatieron contra la escuadra chilena, frente a la punta de Angamos el 8 de octubre de 1879. Por tanto, ha venido a expedir el presente diploma al marinero Nicolás Bonilla porque, como una muestra de la gratitud nacional por el valor heroico que desplegó en esa memorable jornada, pueda usar la medalla que le concede la ley del 28 de octubre de 1879.

Tomas Esteves, prefirió la vida de a bordo a la del cuartel, y se alistó a la fuerza naval para defender a la patria. Era hombre hecho y derecho ya, corrido, rejugado, con 44 años de edad. Nacido en Jequetepeque, distrito de la provincia de Pacasmayo el 6 de junio de 1835. Su progenitora, Micaela Esteves le puso por nombre Tomás de Aquino.

Trabajó desde niño, para él y para su madre. Del autor de sus días no heredó ni el apellido. Sin embargo, ni él mismo soñó que llegaría a elevar su nombre, a darle lustre.

Combatió en Abato el 7 de febrero de 1866 a bordo de la fragata “Apurimac” y, al cabo de los años sería uno de los héroes del “Huáscar”. Sobrevivió a la contienda y en Lima se dedicó al pequeño comercio. Residía en el Jr. Cuzco Nº 233. Después se fue a vivir a los Barrios Altos, a la primera cuadra de las calle Las Carrozas Nº 28.

De su unión no formalizada con Teresa Esteves nacieron dos hijos: Cristina Raquel y un varón, Nataniel. Así, en la intimidad del hogar transcurrieron los días para Tomás Esteves.

Vivió largamente, como quien degusta y atesora las horas que pasan. Quizá narró a sus hijos y a los hijos de sus hijos lo que fue el combate de Angamos, el tiempo que permaneció prisionero en Chile, lo difícil que fue sobrevivir después de la guerra en un país quebrado, sin fuentes de trabajo, desorganizado y desunido.

Falleció en el hospital 2 de Mayo el 18 de febrero de 1919, a los 84 años de edad.

Fueron estos 3 bravos liberteños fieles testigos de cómo fue embestida la fragata chilena “La Esmeralda” por el “Huascar” donde valiente peruano Mariano Portales dio muerte al comandante chileno Arturo Prat como así lo afirma el diario chileno “La Opinión Nacional” el 8 de enero de 1880.

Fue tarde la incorporación, nos dice Manuel Zanutelli Rosas, pues cuando se les citó, los tres, en unión de otros héroes olvidados de la Guerra del pacífico, compartían la mesa en una cita que hace tiempo les había invitado la muerte. Esta fue la primera y única ocasión en que admitió en el Centro Naval del Perú, como socios, a miembros de la plana menor del “Huascar”.

Literatura Liberteña-Perú

WILFREDO TORRES ORTEGA

Escribe: Blasco Bazán Vera, blascobv@hotmail.com

Wilfredo Torres Ortega, nació en Trujillo el 5 de abril de 1920. Fueron sus padres don Julio Torres Plascencia y doña Zenaida Ortega Sobenes. Era el mayor de 5 hermanos: Antonio, Jorge, Gustavo y Raúl. Sus estudios primarios los realizó entre el Puerto de Salaverry y el de Pacasmayo, los secundarios en el Instituto Moderno de Trujillo. Ingresó a esta Universidad trujillana en 1939 y se graduó de abogado en 1946.

Casado con Yolanda Mendoza Gálvez de donde nacen: Glauco, Hugo y Mario, este último heredó la vena literaria del padre.

Torres Ortega tuvo destacada actuación en cuanta institución participó. Fue decano del Colegio de Abogados de La Libertad, Presidente de la Asociación de Docentes de la UNT, Director del Programa de Derecho y Ciencias Políticas y logró viajar a Chile, Argentina y Uruguay llevando siempre la brillantez de sus actos. Como poeta, se adjudicó, en 1963, el premio Poesía que convocó el diario “La Nación” de Trujillo; ya en 1940, l943 y 1945 obtuvo los primeros premios de poesía en los Juegos Florales Universitarios y en 1949 ganó el primer premio a los juegos “Florales del Norte”.

La amistad, fue el principal don que prodigó Torres, por eso, el día de su desaparición terrenal, dejó un hondo vacío difícil de llenar. Con los poetas Carlos Humbeto Berríos, Horacio Alva Herrera, Marco Antonio Corcuera Díaz, selló una inquebrantable amistad por lo que en el inexorable momento de cumplir, Wilfredo, su voto terrenal, aquellos también perdieron algo de su existencia. Algo de lo que tuvieron todos ellos en común: Dar cada uno un poco de sí para no sentirse uno más que el otro.

Wilfredo Torres Ortega fue el censor de esta mancomunada amistad.

Su niñez, refrescada por la brisa marina de los puertos de Salaverry y Pacasmayo le hizo arrancar bellos versos de canto al mar y sus especies. En él depositó sus penas, sus alegrías y en él vio la grandeza de la creación divina. El mar, cual sensitivo ser, le impuso a que su calidad poética aflore con dimensión de ternura. Veamos:

MARINERO

Cien olas botan las sienes

Del marinero de sal.

El viento se arremolina

Con sus puños de titán.

Dibújese el torso nube

Que se cansó de volar.

Tatuados brazos trabajan

La violenta inmensidad,

Tiene en los ojos abiertos,

Luz para el mundo llevar

Una rosa de los vientos

El corazón de cristal.

Hasta que venga la muerte

Silbando mares de paz,

Cien olas baten los vientos

Del marinero de sal.

Fue codirector de “Cuadernos Trimestrales” que fundara conjuntamente con Marco Antonio Corcuera, Horacio Alva Herrera. y Carlos Humberto Berríos.

Casualmente, con motivo de su muerte ocurrida el 4 de agosto de 1972 esta revista le dedicó la edición N° 47 bajo el título “El Mar y sus Palabras” retomando el mismo nombre con que apareció “Cuadernos Trimestrales de Poesía” allá por el año de 1951.

La Revista “NORTE” que es el vocero del Instituto de Estudios Vallejianos, que ahora dirige el escritor y docente Adolfo Alva Lescano, acertadamente en 1996, el N° 3, publica para nuestro sentir un título llamado “Cuatro Sonetos” en la Pág. 116 donde podemos observar lo que escribe Wilfredo Torres Ortega, Horacio Alva Herrera, Carlos Humberto Berríos, Marco Antonio Corcuera Díaz y se menciona a Héctor Centurión Vallejo, todos ellos integrantes de “Cuadernos Trimestrales de Poesía” los mismos que más tarde integraron “Las Tertulias con Vallejo” dirigidas por Germán Patrón Candela.

El escritor Andrés Aguirre Lynch, por encargo de la esposa de Wilfredo Torres, doña Yolanda Mendoza Gálvez, publico el 2003, un libro que contiene toda la poesía del desparecido escritor.

Letras Liberteñas

LUCRECIA VIDAL ARIAS

Blasco Bazán Vera blascobv@hotmail.com

La escritora Lucrecia Vidal Arias, nació en Chilia, Pataz, La Libertad, el 3 de febrero de 1926. Fue profesora de Educación Primaria. En 1979 publicó su libro de narraciones “Oro para el rescate” donde con gran admiración ha logrado plasmar las vivencias que realizó en su pueblo.

Pocos autores liberteños han conquistado la maestría para deleitar a sus lectores con la calidad que esgrime Lucrecia Vidal. Su libro es sumamente ameno, leíble de principio a fin. La objetividad de sus narraciones nos trasladan a gozar de la riqueza material y espiritual contenidos en la bella Pataz..

Oro para el rescate”, es otro de los libros postergados u olvidados dentro de las aulas de nuestra región liberteña. Leerlo, se hace urgente por la calidad identificatoria con nuestra identidad regional. Nuestra escritora nos abruma con su hermosa redacción que nos distrae en demasía. Las tradiciones, cuentos, leyendas, experiencias, añoranzas, historia, deportes, fiestas del lugar, mensajes flocklóricos y por supuesto la infaltable corrida de toros, son redactadas son sabia sencillez pues sentimos el pálpito indómito de nuestra bella serranía liberteña.

Si bien es cierto, el título del libro es muy sugerente, pues aparentemente delata una misión de usar este rico material para afanes aventureros, bien podemos afirmar todo lo contrario, pues, el oro literario que encierra esta joya literaria, nos conquista con tanta sencillez que no cabe sino rendirnos ante la riqueza múltiple que encierra la bella ciudad de Pataz.

Lucrecia Vidas Arias sabe enfrascarnos al narrar la fauna de su pueblo, al añorar los inaccesibles picachos del Hauylillas, Saire y Urpay donde esperaba atento el portentoso águila para lanzarse a la captura de su presa, o el puma rugiente y sigiloso haciendo gala de su astucia para invadir corrales y devorarse el ganado o asombrarse con el rítmico serpentear de la intihuaraca a las orillas del río o finalmente deleitarse con la risueña carita del venado que sediento aplaca su sed en un manantial.

Oro para el rescate”, libro lanzado a luz por el año 1979, no puede estar un momento más, ausente de las aulas donde su deber espera para llevar quietud y regocijo a las almas de tantos estudiantes que desconocen de la grandiosidad intrínseca de su contenido. Las treinta y siete narraciones impresas en él, son sumamente amenas por todos los ángulos que se le mire. Además, no está exento de pasajes históricos reales y contundentes como el paso por esa ciudad de Pataz del venerable Santo Toribio de Mogrovejo o también la jocosa historia de la caída del puente de Calemar que se derrumbó el 5 de marzo de 1902, en plena inauguración, muriendo ahogados muchos moradores.

Nuestra escritora, a partir de hoy, ya no permanecerá oculta por lo que se hace necesario que las autoridades, sea el índole que sea, se preocupen en rescatar sus valores literarios de sus pueblos a fin de que los libros que estos publicaron cumplan el fin propuesto, es decir, sembrar identidad, tal como lo hace Lucrecia Vidal Arias que junto a su hermana, la otra escritora del miso lugar doña Aída Vidal Arias de Gamarra quien escribiera el bellísimo libro “Mi patria es muy linda y se llama Perú”, sean recordadas dentro del rosario de escritores liberteños.

Letras Liberteñas

ROGER VENEGAS SEGURA

Blasco Bazán Vera, blascobv@hotmail.com

El escritor liberteño, Róger Venegas Segura, nació en el distrito de Huanchaco, Trujillo, el 16 de setiembre de 1939. Hijo de don Pedro Venegas Chilmasa y Elena Venegas Segura, quienes se esmeraron por darle una buena educación.

La infancia de nuestro literato transcurrió en el solariego balneario de Huanchaco, donde cursó sus estudios de instrucción primaria, los secundarios los realizó en Trujillo, en el Colegio Gran Mariscal Luis José de Orbegoso y sus estudios Superiores en la Universidad Nacional de Trujillo, donde se graduó como docente en la Especialidad de Castellano y Literatura. Además y también en Periodismo.

Suelto a enfrentar la vida, comenzó a ejercer la docencia en lugares tan alejados como fueron los pueblos de San Marcos (Saposoa), Yurimaguas y Requena, Los Órganos, en Piura y finalmente, Chimbote. También ejerció la docencia en Educación Superior como Profesor Estable de la Escuela Normal “Virgen de las Nieves” en Yurimaguas; actualmente ejerce la docencia universitaria en la Universidad de San Pedro de Chimbote.

En todos estos centros de estudios fue un inquieto cultor de Periodismo Escolar, fundador y asesor de clubes estudiantiles de declamación, teatro, biblioteca, etc. Puso su contingente de entusiasmo fundando y dirigiendo Grupos Scout en Huanchaco, Los Órganos, con dedicación, experiencia y amor por niños adolescentes y jóvenes por un Mundo Mejor. Todas estas prácticas lo impelen escribirlas y es así como lanzó a luz su poemario titulado “Mensajes y poemas”.

Su poemario es sumamente tierno y evocativo y lleva dos partes bien delineadas. La Primera es la que él llama “Mensajes” conformado por dieciséis recados poéticos que advierten al hombre las circunstancias que tiene que enfrentar durante su vida terrena para alcanzar un mejor porvenir. La segunda parte, es la que él llama “Poemas”, y la forman cuarenta inspiraciones donde nuestro poeta evoca las principales circunstancias que lo rodean, donde no puede faltar el canto al caballito de totora, a su Huanchaco querido, al recordado personaje Dean Saavedra, a la patrona de su pueblo ni menos por supuesto el canto a las letanías marinas que son las que barnizan la poesía de Róger Venegas Segura, con la esencia ineludible del terruño del pueblo que lo vio nacer adheridas a la fogosa presencia de su mar huanchaquero, como lo demuestra su poema “Balsía” donde escribe:

Balsía/ amiga inseparable/ del neto huanchaquense/ pretérito bajel de los chimús/ enhiesto adorno playero/ que elevan tu ser/ en común divina…// Balsía/ argonauta ligero/ el hombre es tu guía/ para remontar el mar a lontananza/ en nostálgica esencia/ al vaivén del oleaje inmanente// Balsía/ el balsar es tu cuna/ el hombre tu forjador/ el marino tu jinete/ el mar tu medio/ las olas tu juguete o arrecife/ el tiempo es tu enemigo/ la playa tu paraje/ y tu tumba…”

Como Periodista, Róger Venegas Segura, viene vertiendo siempre su vocación informativa y de opinión en diferentes Medios de Comunicación Escrita y radial. Fue colaborador de “La Industria” de Trujillo, “Oriente” de Iquitos; Heraldo de Trujillo; asimismo es fundador de periódicos informativos culturales, como: “El Jaureguino” en Yurimaguas, “Dialogo” en Tarapoto, “Fuyo” y “Flor de Punga”, en Requena, “El Heraldo en Huanchaco; “El Libertador” en Los Organos; Tribuna del pueblo en Huanchaco. Además incursionó en el periodismo radial en todos estos lugares con el noble fin de cimentar la enseñanza que da en las aulas y para que llegue a la colectividad, ganándose con ello la genuina admiración.

Letras Liberteñas

DOMINGO VALDEZ QUIROZ

Escribe: Blasco Bazán Vera blascobv@hotmail.com

Nuestro escritor nació en San Pablo, Cajamarca el 04 de agosto del año 1959 y desde muy joven se trasladó a radicar en la ciudad de Chepén donde ha comenzado a publicar su inquietud literaria. Si bien es cierto, Chepén, cuenta con verdaderos representantes en el quehacer literario, Valdez Quiroz, llegó y encajó acertadamente en este sublime mundo de la intelectualidad.

Su más reciente obra es la novela corta titulada “Entre Abismos y esperanzas”, donde Domingo Valdez impresiona gratamente por el contenido y los ágiles requiebros idiomáticos de los que hace gala. Hace tiempo que no leíamos a un escritor de novela corta que llene con propiedad el inmenso océano de nuestra curiosidad. Lo que escribe nuestro escritor es sumamente grato y satisface con creces por su agradable lectura que obsequia.

Los personajes y episodios que presenta esta novela son hábilmente narrados por nuestro escritor quien paulatinamente y con mucha sagacidad imaginativa nos sumerge dentro de su campo logrando que su lectura que nos atrape.

Todo lo que expresa esta narrativa da la impresión de ser una novela guiada por el relato de hechos vivenciales, motivo por el cual sus acciones, nos apresan y con holgura nos hacen disfrutarlos de principio a fin.

Los dolorosos episodios que contiene esta novela son aplacados magistralmente por el matiz que despliega Domingo Valdez Quiroz al agregarle a su importante relato la presencia infaltable del amor que cede la mujer quien es la que finalmente comprende co creces los pesares de Pedro Ventura Quiroz, personaje principal de esta novela, al que sin miramiento alguno y con mucha ternura, le prodiga cariño y compresión, volviéndose en bálsamo que amortigua los incidentes lacerantes por los que pasa.

Esta novela corta titulada “Entre Abismos y sombras”, la podemos definir como una novela de aventuras sentimentales con ribetes policiales y políticos donde no falta la presencia de rezagos psicológicos, escrita con el estilo ligero y elegante, que nos permite sumergirnos en ella con suma complacencia. Domingo Valdez Quiroz, inicia con el pie derecho, su viaje intelectual en el mundo hermoso de las letras con la esperanza de entregarnos mañana más tarde otra sorpresa literaria.

Letras Liberteñas

PEDRO SOLORZANO DIEZ CANSECO

Blasco Bazán Vera

El número de escritores que ostenta la Región La Libertad, cobra más auge y calidad cuando a él se une la calidad literaria de Pedro Solórzano Diez Canseco. Nuestro escritor ha nacido en Trujillo el 13 de setiembre de 1936 y sus libros aparecen en el parnaso literario como heraldos anunciando novedades.

Las familias de mi barrio”, es un libro de 462 páginas que abarca la historia de auténticas familias trujillanas, quienes por obra y gracia de Solórzano, han de ser recordadas eternamente por los hechos de su vida transcurridos en el hermoso barrio de la calle San Martín.

El otro libro, “Mi querido y añorado barrio”, de 488 páginas, como el primero, dentro de la Literatura, despierta admiración, por la acuciosidad que impone la narración de los hechos. Pedro Solórzano Diez Canseco, su autor, convierte, maravillosamente, el mundo pequeño donde desarrolló su niñez, que no es nada más ni nada menos que la calle San Martín de Trujillo, en un mundo extenso y diverso, lleno de peripecias, que dan a ese espacio vivencial, recuerdos tiernos que ya no pasarán al olvido.

El libro “Mi querido y añorado barrio”, es un libro preñado de ternura, de recuerdos que su autor nos las trae y nos los deposita en la retina de nuestros ojos cual palpitantes reminiscencias destinadas ha perennizarse por las sabrosas ocurrencias pasadas.

Este es un libro en donde los pequeños metros cuadrados que sirven para desarrollar las escenas, son tratados con amena prolijidad de tal manera que un sólo centímetro, no deja de ser tratado con dinamismo por el certero recuerdo de Pedro Solórzano.

Si bien es cierto, “Mi querido y añorado barrio”, está cargado de múltiples hechos, personajes, amistades, que le dan mucha vistosidad a lo que en él se narra, muy bien los podríamos definir como un binomio literario donde El Autor y su Barrio, la calle San Martín, juegan un fluido papel de copiosa comunicación de íntimas remembranzas y de acertados anécdotas

Pero, no simplemente eso, sino que esta comunicación se torna tierna, confidente, sumamente humana, trasladando al lector ha hacerle pensar con que facilidad se puede transmitir hechos del pasado cuando estos vienen cargados de sonoras vivencias capaces de remover nuestros más profundos sentimientos. De esa manera, Pedro Solórzano hace Historia, pues fluidamente rescata episodios que podrían haber quedado sepultados para siempre.

Este libro “Mi querido y añorado barrio”, permite perennizar hombres y sus hechos. Añorar rincones de un barrio que ahora no son sino recuerdos del pasado. Volver a caminar por las huellas que alguna vez ya las caminaron otros. Sumergirnos en la nostalgia de lo vivido hasta que uno de ellas nos arranque una lágrima.

Mi querido y añorado barrio”, está escrito con la realidad moldeada en la palma de la mano de Pedro Solórzano Diez Canseco, en que éste, cual hábil narrador, va extrayéndola para contarla con amenidad, dejándonos al final el dulce sabor que deja el frágil manjar de recuerdos que han recibido de un barrio querido y añorado, destinado, hoy, por milagro de la pluma de alguien que escribió de él, a vivir eternamente.

Letras Liberteñas

MIGUEL RODRÍGUEZ LIÑÁN

Blasco Bazán Vera, www.blascobazan.blogspot.com

Este escritor, nació en Trujillo del Perú, el 16 de noviembre de 1961. Hijo de Miguel Rodríguez Paz y Rosalinda Liñán Ruiz. Es traductor y poeta. Cursó estudios superiores en la Universidad Central de Venezuela y en la Universidad de Provenza (Francia). Residente en Francia desde 1984, en París, Aix-en-Provence, actualmente en Marsella. Su obra literaria es abundante, habiendo, hasta el momento, publicado dos interesantes novelas, “Leyenda del Padre” y “Eva nivelunga”.

La primera novela narra las peripecias que pasa el padre del novelista en el mundo de la abogacía, del recitar de poemas, de la fascinante bohemia, del anchuroso mundo que le brinda la pasión por las letras. Esta novela es interesante, porque a don Miguel Rodríguez Paz, padre del autor y personaje central de la novela, su hijo Miguel, relata hábilmente las hazañas que pasa su padre, en el lugar llamado Puerto Perdido, que no es nada menos que la ciudad de Chimbote.

Miguel Rodríguez Liñán, quizá, modestamente no acepte ser catapultado a la mansión de los buenos escritores, pero, la redacción que emplea, el buen uso del lenguaje, la trama colmada de acciones, de acontecimientos inesperados, y, en ocasiones, extraordinarios, llevando a concluir con éxito la travesía en que se embarcó nos permiten afirmar que estamos frente a una verdadera revelación, literaria.

“La leyenda del padre”, es una novela íntimamente apegada al ambiente socio cultural de Chimbote donde la imagen del padre del novelista aparece como una centella azotando las fibras del hijo, clavándosele en su ser, haciéndose una sola persona, de tal manera, que éste, su hijo Miguel, logra plasmar y narrar con gran precisión la vida desplegada por su padre, sus rimbombantes discursos, el mágico embeleso con que sumió al oyente a través de sus contundentes recitales, su pasión de concebir y concebir más agrupaciones culturales y, por supuesto, las aventuradas vivencias desplegadas para mantenerse en pie ante las patrañas que le ofreció la vida y sus misterios. Sin duda alguna, su padre, protagonista principal, propicia los episodios de su vida que muy bien sirven de insumo para que su hijo, con estilo llano y sencillo, escriba una novela penetrante y original, llamada a convertirse en una excelente pieza literaria.

Su otra novela, “Eva Nibelunga”, está ambientada en los hermosos años 80 en Aix-en-Provence, bella ciudad francesa, donde nos ofrece una magnífica y deliciosa lectura sobre los inmigrantes latinoamericanos en Europa, y de las bellas muchachas que alegran la vida y la literatura, al más puro estilo de ese fauno inmortal llamado Henry Miller.

“Eva nibelunga”, más que una novela, es un gozo carnal, una experiencia interminable. Es para leerla de un tirón. Los personajes son movidos ajedrecísticamente donde el jaque mate para el lector, es labrado con mucha fruición, de tal manera que la muerte inesperada y artera, es recibida con pizcas de jocosidad y humor.

Casualmente, el humor es tratado con sensible delicadeza y cada personaje juega el exacto papel que le corresponde. No hay exageraciones ni rasgos circunstanciales que empañen su lectura, y, comulgando con el mismo Miguel Rodríguez Liñan, también podemos aceptar que en esta novela, todo lo que en ella le parece erróneo al autor, respecto al fenómeno amoroso de los siglos XI o XII, no hay tal error, pues los hechos sobreviven, mal que bien, impregnados de sentimientos categóricos tal como son concebidos en la cultura occidental que nos permiten nuevamente afirmar que “Eva nivelunga”, es un fortísimo esfuerzo de coherencia y lucidez, donde, sin ningún tapujo, los hechos que en ella se narran, cobran contundencia por la originalidad con que son expuestos.

Letras Liberteñas

ALFREDO REBAZA ACOSTA.

Escribe:Blasco Bazán Vera

Este escritor nació en Huamachuco el 2 de diciembre de 1902. Hijo de Alfredo Rebaza Acosta y Grimanesa Acosta Gamboa. Sobrino de Nicolás Rebaza Cueto. Estudió su primaria y secundaria en el colegio “San Nicolás” de su pueblo natal. La superior entre Trujillo y Lima. Su padre fue Subprefecto de Huamachuco y el maestro Rebaza lo recordaba como un hombre arrogante, viajero incansable y profundamente amoroso con sus hijos. De su madre contaba que había sido la personificación de la bondad y la sumisión, profundamente abnegada, dejó grandes huellas en la personalidad de sus nueve hijos donde Alfredo Rebaza fue el segundo. Curiosamente a todos les pusieron nombres que empezaban con la letra A; Amelia, Alfredo, Alicia, Adriana, América, Aída, Arturo, Antero y Andina.

Nuestro escritor Rebaza es descendiente por línea materna del “Solitario de Sayán” Don Faustino Sánchez Carrión, Secretario del Primer Congreso Peruano, uno de los autores de la Constitución de 1823 y ministro general de Bolívar. Cuando el año 1919 ingresó a la Universidad de Trujillo, ocupó el primer puesto conjuntamente con Carlos Manuel Cox, quien sería con el correr de los años, destacado intelectual y líder del Partido Aprista Peruano. Estudiando con verdadera dedicación culminó su carrera en 1923, obteniendo el título en Bachiller en Historia, Filosofía y Letras. Durante una retreta en Trujillo, conoció a la que iba a ser el amor de su vida, Georgina Flores Pinillos. Bella y comprensiva dama que lo acompañó siempre. Juntos fundaron un hogar ejemplar en el que procrearon tres hijos: Adriana, Alfredo y Alberto. Como padre cariñoso, supo manifestar su afecto y estimularlo mejor con sus hijos, convencido que es el niño el que tiene que construir su propio aprendizaje, se negaba adrede en realizarles sus tareas escolares, basándose en estímulos despertaba en ellos el aprendizaje. Quienes lo conocieron afirman que supo despertar el autoestima en sus hijos pues comprendió que ahí redicaba la base de la relación humana. Eso mismo hizo con sus alumnos que eran también, como lo solía decir muchas veces: sus hijos.

Desde niño cultivó una profunda emoción social que lo llevó a valorar a los seres humanos más allá de sus rostros, a interesarse por los marginados sociales, a rechazar las injusticias que tan comúnmente había visto cometer en la sierra. Creía en la igualdad de los hombres y rechazaba todo lo que opusiese a ello.
Siempre se distinguió por su amor al estudio sin dejar de lado el servicio social y apego hacia los más necesitados. El año de 1948, el Concejo Universitario de la Universidad de Trujillo, en sesión del 7 de mayo de aquel año, ratificó, el nombramiento hecho a favor de Rebaza Acosta, por el Concejo de la Facultad de Letras y Pedagogía, como Catedrático de Historia de la Cultura para el Primer año del Colegio Universitario de Letras. El 10 de mayo del mismo año lo ratifican también como Catedrático para el curso de Literatura Oriental y Helénica, Literatura Latina, Medioeval y Castellano (curso avanzado) en el Instituto de Literatura, anexo a la Universidad. EL 22 de junio del 48 es ratificado como catedrático de Historia de la Cultura, primero y segundo curso para el primer y segundo año del Colegio Universitario, según notas del folio 227 del Escalafón de la Universidad de Trujillo.

En Trujillo traba amistad con lo más graneado de la intelectualidad y de los afanes de ésta, sobre todo en el campo político-social. La Revolución de Trujillo de 1932 sorprende a Rebaza cuando éste se encontraba fuera del país. Llegado, es designado por el propio Haya de la Torre para que escriba un libro sobre los acontecimientos de este proceso revolucionario. Fiel al pedido escribe su libro La Revolución de 1932” en el que vierte reales alcances sobre lo sucedido en estos convulsionados momentos en Trujillo. Por sus ideas sociales estuvo preso en la isla “El Frontón” durante 2 años y medio. Salido de la cárcel se dirigió a Lima donde llegó a ocupar el cargo de Director de Estudios del Colegio Militar “Leoncio Prado” y es donde comienza a desplegar una profunda tarea pedagógica escribiendo sobre Literatura Universal e Historia Universal.

Llegó a ser también catedrático de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Entre otras obras literarias escribió “Anecdotario Peruano” que es la colección de anécdotas recopiladas de acuerdo al oficio que desempeñaban muchas de sus prestigiosas amistades como médicos, abogados, toreros y profesores. También “La Monografía de Huamachuco” que premiada en la exposición del Primer Centenario de la Independencia de Trujillo en 1921; el curso de “Pre Historia”, el “Anecdotario Histórico” y la “Historia de la Cultura; “El Problema Educativo Peruano”, tesis con la que obtuvo el título de Doctor en Educación en el año de 1962.
En 1938 ingresó a la Universidad Nacional Mayor de San Marcos a estudiar derecho pero lo abandonó al sentir que no concordaba con sus aspiraciones. Falleció en Lima en 1990.

Letras Liberteñas

MARIO ALBERTO PUGA IMAÑA

Blasco Bazán Vera, blascobv@hotmail.com

Este gran escritor, abogado y periodista, nació en Trujillo, Región La Libertad, el 30 de diciembre de 1915. Fueron sus padres don Miguel A. Puga y doña Celia Imaña de Puga.

Vivió elegantemente buscando la satisfacción de las necesidades de los demás. Conoció muchos países y por ser conspicuo militante del APRA, sufrió, como pocos, el odio incomprendido de sus adversarios. Esto motivo llegar a México donde fue director de la Revista “Humanismo” de ese país, que apareció en 1954 cubriendo 20 números bajo un selecto directorio conformado por Andrés Eloy Blanco (Venezuela), Alfonso Caso, Carlos Lazo, Miguel Ángel Ceballos, Margarita Paz Paredes y Rafael Loera Chávez (México), Juan de la Encina y Manuel Sánchez Sarto (España), todos de gran prestigio internacional.

Mario Puga Imaña, fue abogado, poeta, novelista y sobre todo, íntegro luchador social. Siendo muy joven escribió sus primeros poemarios que fueron loados profusamente por el claro estilo que mostraban.

Por ser aprista fue deportado a México a raíz de los sucesos de 1948. Aquí trabajo en la compañía Nacional Financiera. Su estancia en México coincidió con el ochenio del general Manuel A. Odría. Mario Puga fue un hombre de acrisolados principios y de convicciones bien definidas. En México, donde llegó en compañía de su esposa Carmen Mendoza y 2 de sus menores hijos, desplegó una brillante vida política y también periodística, codeándose con las mejores inteligencias de esa época. La característica de la Revista “Humanismo” que dirigiera brillantemente, fue plantear la necesidad de perfilar la implantación de un flamante humanismo en lares mexicanos al mismo estilo del que perfiló el filósofo peruano, Antenor Orrego, en el Perú.

Escribió los libros “Elegía a la muerte de León Troski”, “3 Poemas civiles”, “Lo humano distante”, “Fraternidad frente al dolor”, “La ecuación Espacio-Tiempo Histórica del Perú Prehispánico”, “El Ayllu, su naturaleza y régimen económico social”, “Los incas, sociedad y estado”, “Ternura”, y su novela “Puerto Cholo”, de la cual su prologuista Wiston Orrillo afirma que “el protagonista de la obra, el “cholo” Manuel Fiestas es, en su medio geográfico, un Rosendo Maqui y, a nuestro juicio merece el honor y el reconocimiento del conocidísimo personaje de Ciro Alegría”.

Su poemario “3 Poemas civiles”, escrito el año de 1940, nació bajo una triste y a la vez despiadada opresión que pasaban los militantes apristas, partido del cual militó Mario Puga Imaña. Este poemario encuadrado dentro de la heroicidad de los peruanos que se embarcaron, dando lo mejor de sí, a fin de alcanzar una patria pletórica de Justicia y de Libertad está dividido en tres secciones con los subtítulos de: “Oda al Héroe Civil”, la primera; La segunda, se subtitula “Crimen”, (dedicada a la memoria del líder aprista Manuel Arévalo Cáceres); y la tercera, “Proclama contra el odio” donde fustiga con reciedumbre los males de la sociedad y la atrocidad que ostentan algunos hombres importándoles poco los medios que se valen con tal de alcanzar su protervos fines. Leer el contenido de este poemario es introducirse en un campo donde la incertidumbre se da la mano con el heroísmo para hacer nacer un poemario colmado de intensa calidad humana. Mario Puga Imaña siempre estuvo dentro de los más distinguidos escritores de nuestra Región al que urgentemente ahora lo rescatamos pues su vida es digna para pintarla dentro de un cuadro de auténtica honestidad.

De la segunda sección, anotamos el poema que dice: “Una trágica sombra se ha elevado/ sobre los hombros limpios. Una maldición/ nacida en cualquier pecho de furia. Y todo, todo se ha ensombrecido con el crimen.// Un silencio de muerte en la noche/ que sucede a la noche. Las jaurías de asesinos/ acosando al hombre. Amordazando gritos,/ taponando protestas//. Jadeante silencio de agonías. Silencio/ Jadeante de tu sombra del crimen sobre el pueblo oprimido”.

Nuestro escritor, después de tanto escribir y trajinar con la decencia del nacido para transformar, murió en Lima el año 1959 a le temprana edad de 44 años cuando mucho más se esperaba de él.

Letras Liberteñas

Walter Pérez Valderrama

Blasco Bazán Vera blascobv@hotmail.com

El escritor Walter Pérez Valderrama, nació en Santa Cruz de Chuca, provincia Santiago de Chuco, el 24 de enero de 1926. Hijo de José Sócrates Pérez Vásquez y Luz Angélica Valderrama Orbegoso. Es graduado de la universidad de San Marcos, Lima Perú, en Literatura Española; y en la Universidad Loyola, en Chicago, Illinois en Lenguas Modernas y Matemáticas. Establecido en Estados Unidos trabajó en los Programas Bilingües, inglés-español, en escuelas secundarias y en los Community Colleges de Chicago, Illinois. Desde el año 1996 es profesor retirado de matemáticas.

Se le conoce por el seudónimo de “Chaco Gil” y vive actualmente en Deltona, Estado de Florida. Es un viajero infatigable y acucioso lector e investigador de libros y documentos. Entre sus obras citamos su poemario Ojo de agua” y sus narrativas “Cerros del Pechuguay” y “La casa del membrillo”.

Ojo de agua”, es un sabroso poemario que encierra nada menos que 172 poemas distribuidos en cinco partes: 1) A las Ideas, 2) Al Amor, 3) A las Personas, 4) A los Territorios y 5) A los Animales, demostrando precisión, armonía, belleza e historia en todos ellos. Cerros de Pechuguay”, es una novela costumbrista que resalta con admirable y profunda melancolía, los enigmáticos contrastes orográficos existentes en su pueblo, que han jugado importante papel en la infancia de Chaco Gil, dando lugar a que nuestro escritor haga nacer sentidas vivencias que le permiten no olvidar nombres familiares como José Pedro Pérez Villegas, Pantaleón Pérez Oruna, y José Sócrates Pérez Vásquez, padre de Chaco Gil. Son recuerdos matizados con sendas evocaciones narradas con prontitud y esmero. “La casa del membrillo”, es también una novela costumbrista que linda con recuerdos familiares donde la planta de ese fruto es el lei motiv que congrega su inquietud literaria, pues, ese árbol de membrillo, según Chaco Gil, fue el compañero que cerca de él se construyó una casa a la que nunca conoció, pero sí, la sintió, y muy cerca, que le impactó un recuerdo imperecedero y para no olvidarla tituló a su libro: “La casa del membrillo”.

La poesía de Walter Pérez Valderrama ha recibido diversos reconocimientos, entre ellos, del Poetry.com, que a principios del año 2007 premió al poeta por su perspectiva y creatividad original. Hace poco, también el 2007 la Noble House Publishert, de Londres, Inglaterra publicó su poema “A ien to our Galactic Universe” y ese mismo año, la revista Isla Negra, seleccionó su poema “El poeta a caballo” para integrar “ElCanto General y otros poemas”, en homenaje al poeta Pablo Neruda.

La vida de Chaco Gil es una vida de novela, y la Sociedad de Poetas y Narradores de la Región Lima Provincias con sede central en la ciudad de Huacho, lo tiene entre sus literatos preferidos reconociendo en él a un extraordinario narrador y poeta triunfante. Preguntado del por qué escribe como bajo el seudónimo de “Chaco Gil”, responde que cuando vino a vivir de Chicago a Deltona, Florida, escribía en los periódicos hispanos, con su nombre normal, pero el director le dijo que el nombre Walter, ya había en diario tres escritores con ese nombre, y le sugirió escribir bajo un seudónimo para evitar la confusión. Estando de vuelta en Chicago, entre otros asuntos, Walter Pérez Valderrama se puso a meditar lo sugerido, buscó un nombre de su pueblo, que sea corto y sonoro y recordó a un personaje de su pueblo Santa Cruz de Chuca, de apodo, Chaco, todos lo conocíamos como Chaco...y como su madre apellidaba Gil, acomodó el nombre y se puso Chaco Gil…y así nació el seudónimo, nombrecito corto y sonoro, que viene aportando mucho a las letras liberteñas.

Letras Liberteñas

EDGAR WILDE PEJERREY VÁSQUEZ

Blasco Bazán Vera, blascobvhotmail.com

Nuestro escritor, es nacido en el distrito de Pueblo Nuevo, Provincia de Chepén, La Libertad, el 24 de abril de 1957. Hijo de Lázaro Pejerrey García y Florinda Vásquez Abanto.

El año 2007 en una de sus travesías por Ecuador, después de haber estado visitando Marsella, Francia, publicó, en el país del norte, su libro de cuento titulado “Narraciones cortas”, y lo llama así porque son narraciones cortas que ha pesar de esa limitada extensión, vienen cargadas de una profunda vitalidad, de ingenio versátil y de mucho equilibrio emocional que leerlas, es deleitarse en sobremanera.

Edgar Pejerrey, aparte de sus coterráneos, los hermanos Eduardo y Hernán Silva Pérez, experimentados arqueólogos y de la poetisa Frida Alva Ríos de Bazán, se convierte en el primer narrador de cuentos, nacido en ese hermoso distrito de Pueblo Nuevo. Su libro “Narraciones cortas”, así lo confirma.

Este escritor pueblo novense, antes de iniciar sus relatos, nos advierte lo que fue su existencia personal, es decir, brevemente nos empapa de su niñez y su juventud vivida en el pueblo que lo vio nacer, que nos la presenta como un abismo irreal que separa lo común de la vida con la magia del destino. Esta autopresentación nos prepara para estar frente a un escritor reflexivo cuya vena literaria es pulcra y abundante que mejor la podemos conocer a través de su inicial escrito “De paso por la vida” donde se reafirma nuestro concepto de estar compartiendo una amena lectura regalada por un hombre de experiencia, de colmada imaginación, que nos ofrece trozos de auténtica creatividad literaria a través de sus ocho cuentos, cortos, pero preñados de una admirable fantasía.

Como muchos autores regionales, entre los que destacan Isaac Goldemberg Bay, Juana Wong Kcomt, Frida Alva de Bazán, Clodomiro Guevara Vargas, Aída Vidal de Gamarra, Máximo Lam Ganoza, Los hermanos Abraham y Felipe Arias Larreta, sin olvidarnos del genial César Vallejo Mendoza, tienen, en sus escritos, la presencia guía y añorante del pueblo que los vio nacer, en este caso, Edgar Pejerrey Vásquez, a través de sus cuentos cortos de este su libro, demuestra estar ligado a su pueblo como el ave al nido o la tierra al árbol.

Todos los cuentos de su libro, son para leerlos sin descanso. Desde el primero titulado “La ventana”, pasando luego por “El último mochica” y acto seguido por “Al espíritu del médano”, “entre el deber y la pared”, “Piña de nacimiento”, “Ojos sin luz”, “conversaciones en el Maruri” y en último lugar “Al final de la tarde”, nos dejan un grato sabor por causa de la amena narración con que han sido concebidos.

Edgar Pejerrey, llama a su libro “”Narraciones cortas”, diríamos en cambio que a pesar de su cortedad hay que reconocer que los cuentos cortos tienen la capacidad de seducir a gente que es muy poco probable que se sienta atraída por una novela. Pejerrey Vásquez se embarca, para narrar, en un estilo llano o sencillo, con la única finalidad de darle claridad y sentido a lo que escribe. Sin necesidad de recurrir al uso de un estilo satírico, logar, Pejerrey, que nos desternillemos de risa a través de sus retratos escritos, como nos lo demuestra a través del relato “La ventana”, cuento, íntimamente relacionado con el ambiente en que desarrollo su juventud; o la excelente narración esgrimida al relatar “ “Piña de nacimiento”, relato que se convierte en emblemático por la agilidad con que se narra los episodios históricos que muy bien encaja en determinar de que un cuanto para ser tal debe contener historia, sino, no es cuento; aparte de la brevedad, de la enseñanza, de no dar lugar a la presencia de tiempos muertos; es decir, el libro “Narraciones cortas” de Edgar Wilde Pejerrey Vásquez, reúne los méritos suficientes para llamársele tal porque finalmente su lectura nos conduce a desenlaces que despiertan la admiración del ávido lector.